Informe Otálvora del 22 de abril de 2017
|
Funcionarios militares y civiles encapuchados reunidos en una calle de Caracas el 19ABR17. Foto: Cortesía |
Venezuela es una amenaza
para el hemisferio, aseguró el representante de México ante la Organización de
Estados Americanos. Los temores de gobiernos de la región, sobre la deriva
dictatorial y militarista del gobierno chavista, se multiplicaron luego que
Nicolás Maduro realizara una serie de anuncios ante la convocatoria hecha por
la Oposición para marchar hasta el centro de Caracas el 19ABR17, día de fiesta
nacional en Venezuela. La noche del domingo 16ABR17, Maduro rodeado de los
jerarcas civiles y militares del régimen, dijo contar con “poderes especiales”
para encarcelar opositores a quienes acusó de preparar un golpe de Estado. El
17ABR17, Maduro anunció la dotación de fusiles a medio millón de civiles que
conforman la llamada “Milicia Bolivariana”. El 18ABR17, en presencia del alto
mando castrense, ordenó la activación de un plan militar, sustentado en la
suspensión de garantías constitucionales dictada por Maduro desde el mes de
enero de 2016, y que guiaría la represión a la marcha opositora del día
siguiente.
El representante
permanente del gobierno mexicano ante la OEA, Luis Alfonso de Alba, dijo en la
reunión ordinaria del Consejo Permanente del organismo del 19ABR17: “quiero
expresar preocupación por el reciente anuncio por parte del Ejecutivo [venezolano]
de ampliar la milicia nacional bolivariana y la intención de armar a cientos de
civiles como miembros de dicha milicia. Armar a civiles, distribuir armas es la
peor de las medidas que se puede tomar y representa una grave amenaza no sólo
nacional sino para el hemisferio en su conjunto”. La posición del mexicano fue
secundada por Chile y Colombia. El representante del gobierno socialista
chileno, Juan Aníbal Barría, rechazó “la militarización de la sociedad y la
política en Venezuela".
*****
Las graves expresiones
del diplomático mexicano en la OEA se produjeron en paralelo a las denuncias
del gobierno de Colombia sobre la creciente militarización impuesta por el
régimen chavista en Venezuela. Desde su ascenso a la presidencia colombiana el
07AGO10, Juan Manuel Santos privilegió sus relaciones con Hugo Chávez y Nicolás
Maduro a cambio del apoyo político y logístico de Venezuela a las negociaciones
con las Farc. Desde mediados del año 2015, las relaciones entre ambos gobiernos
tendieron a deteriorarse al punto de que actualmente Colombia mantiene su
misión diplomática en Caracas sin Embajador. La diplomacia de Santos, hasta
ahora, se había colocado en posturas acomodaticias ante la crisis política
venezolana, valiéndole severas críticas de los sectores uribistas abiertos
aliados de la Oposición venezolana. La posición oficial colombiana ha estado
variando en los últimos meses y la ausencia de puentes entre ambos gobiernos quedó
patente en la crisis provocada por la instalación de un campamento militar de
tropas venezolanas en la ribera derecha del rio Arauca a finales de marzo. La
cancillería colombiana se ha sumado al creciente grupo de gobiernos del
continente que mantienen una posición crítica ante la ruptura del orden
constitucional en Venezuela y su representante permanente en la OEA, Andrés
González Díaz, fue un activo actor para aprobar la aplicación de la Carta
Democrática al gobierno Maduro.
*****
El 18ABR17, Santos
tuiteó: “Vemos con seria preocupación la militarización de la sociedad
venezolana. Un llamado a la cordura”. Para ese día Maduro había ordenado el
despliegue de tropas militares “al trote” en todas las ciudades del país y
había movilizado miles de “milicianos” hasta el palacio presidencial en Caracas
en un claro intento de atemorizar a los opositores.
El 19ABR17, Santos
utilizó nuevamente el Twitter para referirse a Venezuela: “Solicité a la
Canciller que pida hoy al Secretario Gral de la ONU poner su atención en la
preocupante militarización de la sociedad venezolana”. Cuando Santos tuiteaba su
canciller, María Angela Holguín, volaba hacia Nueva York para cumplir una agenda
en la ONU. Tras reunirse con el Secretario General de la ONU, el portugués António
Guterres, Holguín afirmó: "conversamos sobre la preocupación del gobierno
colombiano sobre el armamento de milicias en Venezuela. Es una preocupación
compartida por muchos”.
Al amanecer del
20ABR17, Santos nuevamente tuiteó sobre Venezuela: “Hace 6 años se lo advertí a
Chávez: la revolución bolivariana fracasó”. En el palacio de Miraflores
entraron en cólera contra Santos: en cadena de radio y Tv, Maduro amenazó con
develar secretos de las negociaciones Santos-Farc, calificó a Colombia como un “país
fallido” y afirmó que los venezolanos “somos los fundadores de nuestra hija
Colombia”. El despecho mostrado por Maduro, con sus impresentables ataques
contra Colombia, daba cuenta del golpe recibido desde Bogotá. Iván Márquez, el
jefe de las guerrillas de las Farc, calificó el hecho como “amarga ingratitud
del Gobierno Santos hacia Venezuela”.
*****
El cambio de Santos
ante el régimen venezolano confirmó la creciente pérdida de apoyo internacional
que ronda al gobierno chavista. La decisión de Maduro de impedir la marcha
opositora del 19ABR17, de llevar a tribunales militares a los líderes
opositores y activar un plan con uso de militares
y civiles en la represión, lejos de mejorar su imagen externa la ha empeorado. La
Oposición es conceptualizada como un “enemigo interno” dentro de los planes y
la doctrina militar chavista y a los opositores se les aplica un no declarado
“derecho penal del enemigo”. Las prohibiciones de marchar en Caracas y el uso
desproporcionado de fuerza contra concentraciones masivas devino en una nueva
ola de violencia en Venezuela, con cruentos enfrentamientos callejeros, ataques
armados contra edificaciones civiles, actos de vandalismo y saqueos de
establecimientos comerciales incluso en zonas populares que por más de una
década fueron seguidoras del chavismo.
*****
La sesión ordinaria de
la OEA del 19ABR17 había sido convocada para escuchar informes de gestión del presidente
del Comité Jurídico Interamericano y del Instituto Interamericano de
Cooperación para la Agricultura. El tema “Venezuela” no figuraba en la agenda.
El representante permanente alterno e interino del gobierno Maduro en la OEA,
Samuel Moncada, solicitó la palabra en la sección “Otros asuntos” para poner en
duda la legalidad de la resolución del 03ABR17 en la cual el Consejo Permanente
reconoció “la alteración inconstitucional del orden democrático en la República
Bolivariana de Venezuela”. El gobierno Maduro califica como “inexistente” la
resolución de la OEA que acuerda iniciar gestiones diplomáticas enmarcadas en la
Carta Democrática Interamericana. Esa resolución, por cierto, cobró cuerpo gracias
a los gobiernos de El Salvador y República Dominicana, supuestos aliados de
Maduro, que se abstuvieron en la votación permitiendo la aprobación por consenso.
Ante la introducción
del tema por el propio enviado de Maduro, los representantes de Chile, Perú y
EEUU tomaron la palabra para referirse a la situación venezolana. El chileno
leyó el comunicado suscrito el 17ABR17 por once gobiernos (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa
Rica, Guatemala, Honduras, México, Paraguay, Perú y Uruguay) con “un llamado” al gobierno Maduro “para que
garantice el derecho a la manifestación pacífica (…) y que impida cualquier
acción de violencia en contra de los manifestantes”. El comunicado igualmente exhortaba
“al Gobierno” (…) “para que rápidamente
se definan las fechas para dar cumplimiento al cronograma electoral que permita
una pronta solución a la crisis que vive Venezuela y que preocupa a la región”.
El comunicado implícitamente afirmaba que en Venezuela la celebración de
elecciones es decidida “por el gobierno”.
Kevin Sullivan, representante
interino de EEUU, presentó el comunicado emitido por su gobierno el 18ABR17 que
“deplora el uso de violencia contra
manifestantes desarmados” y el uso de “colectivos” a los cuales definió como “bandas
armadas bajo control político de líderes del partido [oficialista] PSUV”. EEUU
pidió al gobierno Maduro cumplir los compromisos adquiridos en el “diálogo” con
la Oposición celebrado en el otoño de 2016. La representante de Perú, Ana Rosa
Valdivieso, afirmó que en Venezuela se ha producido una “ruptura del orden
democrático y constitucional”.
La respuesta del
representante de Maduro en la OEA fue acusar a EEUU, al Secretario Luis Almagro
y a un grupo de gobiernos de estar promoviendo un complot en Venezuela. Según
el diplomático chavista, “la OEA se está utilizando como sala de comando para
estimular la violencia en Venezuela”: el régimen venezolano insiste en achacarle
a gobiernos extranjeros la grave crisis
que vive el país. Ese día, sólo el representante de Nicaragua tomó la palabra
para defender al régimen chavista
*****
Al día siguiente, el
20ABR17, las cancillerías de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica,
México, Paraguay, Perú y Uruguay emitieron un nuevo comunicado condenando “enérgicamente
la violencia desencadenada en Venezuela” y reafirmando “que es urgente que las
autoridades venezolanas adopten medidas para asegurar los derechos
fundamentales y preservar la paz social”. La propaganda oficial chavista
intenta mostrar a la Oposición venezolana como “terrorista”, con lo cual no ha
logrado convencer en el exterior.
*****
El gobierno argentino,
sin acto protocolar y previa consulta con los gobiernos suramericanos, asumió
el 20ABR17 la Presidencia protempore de Unasur, la cual estaba en manos de
Nicolás Maduro. Unasur reúne a los doce gobiernos de Suramérica y actualmente opera
en manos de directores designados por Ernesto Samper, quien convirtió el
organismo en apéndice de los gobiernos castrochavistas. De hecho, en la página
web de Unasur aún aparece Dilma Rousseff como mandataria de Brasil ya que
Samper y Maduro desconocen al actual gobierno brasileño.